jueves, 23 de diciembre de 2010

23 de Diciembre


Es en una noche de verano, una de un 23 de Diciembre. Es cuando recuerdas una húmeda tarde de invierno, lluvia intensa, frio hasta los huesos. Tienes el cuerpo tan abrigado que llegas a sudar, pero el rostro se te congela con las brisas de viento que trae la puerta de la micro abriendo y cerrando a cada tantos metros.

Y es una melancolía en el aire. Y es un frio en el corazón. Y es que no puedes dejar de mirar las gotas haciendo carrera a través del vidrio. Y no puedes hacer más que escuchar esa vieja canción para ti mismo, esperando a que llegue el próximo paradero, bajo la lluvia de un 23 de Diciembre.

lunes, 18 de octubre de 2010

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El calor de su centro, trata de aplastar su cuerpo, desgarrando cada centímetro de su ánimo desalentado, donde una sonrisa no es más que un juego de niños sin calcetines.
Cayendo en pesado mundo. las manos de la misericordia son anatomía del diablo, a los pobres ángeles de alas negras se las han cortado ya.
No pude evitar escuchar sus alaridos, pidiendo auxilio. Que los ángeles blancos les hieren hasta el alma moribunda del segundo heredero. Que los dioses se han quedado en paz ante la tortura, disfrutando el dolor ajeno para soportar el propio.
Sálvenlos.... déjenlos volar!

domingo, 12 de septiembre de 2010

"Dame"

  • Es menos que un sentimiento hacia tí.
  • Dame un beso antes de dormir, dame una excusa para sonreir.
  • Mas ninguna excusa me puedes inventar ya.
  • Amame sin corazón, y yo sin razón.

"DAME"

Hoja.


Una tarde gris, unas nubes circundantes, una suave brisa trae la lluvia de primavera.

La boca seca, los ojos enrrojecidos y las manos sudadas. Una soledad absoluta.

Una guitarra olvidada, un suspiro prófugo, una estufa encendida. Un billete, un vaso, un lápiz.

Y una hoja... pista de baile para mi alma.

viernes, 16 de julio de 2010

Teatro de marionetas.


Acallar esas voces... tú que ríes, te enfadas, analizas y calculas en mi contra... vete de mí! Vete a dónde sea que naciste. Donde todos te amen, donde no me hagas daño, donde no tomes los hilos de mis manos para hacer lo que tu voluntad estime conveniente. Porque éso soy para tí ¿no es cierto? Una marioneta más. Ya es suficiente con mi máscara, el teatroe stá completo, deseabas unirte tú también? crees que necesitabamos una titiritera desquiciada, una sin escrúpulos ni culpas? Vete... sólo... déja de hacerme sentir tu pequeña marioneta.

Todas mis máscaras arregladas en perfecto orden, alfabético, forma, colores, lo que tú pidas, las tengo todas. La función no puede detenerse, y quieres continuar en ella, ¿cierto? Te gusta el teatro, yo te atraje a él... ahora no lo quieres dejar tampoco. Pero no, tú no eres yo, yo no soy tú... yo no quiero terminar con un cuchillo en el corazón, no quiero que rías del último, porque, antes de que te des cuenta... los hilos se cortarán, se enrrollarán en tu cuello, y hasta entonces dejarás de existir.

miércoles, 14 de julio de 2010

Fiestas de clase.


Con una sonrisa en el rostro, los labios de un rojo carmesí... perfecta estaba para salir. Pero el destino sabe, el destino traza caminos para quien los desee, y ella escogió.

El vestido rojo ciñendo su figura bajo el abrigo negro, el cabello recogido y los zapatos de tacón haciendo sonar sus pasos al andar sobre la loza del salón. El nerviosismo crecía en su interior, como mariposas revoloteando en el campo en plena primavera, estaba cerca, sólo debía encontrarle entre los muchos hombres del lugar.

Un mozo le ofreció dejar su abrigo.

-Busco a Dean Weird- dijo ella al mozo, el cual sonrió con amabilidad y luego le indicó con un gesto que le acompañara.

El hombre era muy elegante, con un caro perfume había llenado el ambiente a su alrededor, una cena agradable, con platos exquisitos, un vino fabuloso le recorrió la sangre de pies a cabeza, las mejillas se le habían tornado rosas en unos minutos extasiados. Vino iba, vino venía. Risas, comprometedores susurros en el oído. Todo parecía sacado de una película de lujos y vidas de altas sociedades. Luego... ¿cómo había llegado hasta ése lugar de mala muerte? Con su vestido desgarrado y lleno de barro... el maquillaje corrido y el vino perdiendo efecto sobre los sentidos.

lunes, 12 de julio de 2010

Cuento nº2 de un pequeño arlequín.


Ví un pequeño escenario, a lo lejos, muy lejos de él, un pequeño arlequín.
Le grité, no respondió. Moví los brazos, giraba con los ojos hacia el cielo. Corrí y él se subió al escenario. Me detuve en seco, comenzaba a brincar como bailando una diablada.
Entonces pensé: "¿qué tanto de arlequín puede ser un arlequín?"
*imágen de: www.andoarlequiando.blogspot.com*

sábado, 29 de mayo de 2010

Hábitos.

Cada centímetro entre sus cuerpos, cada mirada cada pensamiento parecía palpable en el aire.... pero algo estaba mal.. ¿qué era? no estaba todo correcto... no era todo como debía ser...

Las miradas cambiabas... se observaban, primero con pasión, luego con amor, devoción... cansancio, aburrimiento.. dolor... envidia... odio...

Tocaban sus corazones con una ternura envolvente, un verdadero sentimiento floreciendo, y sin embargo, sus miradas decían lo contrario. "Debo pensar en mí"... lo mejor. "Tu rostro regresa a mí siempre... y todo se vuelve surrealista...". Sus miradas escapan por un segundo a su contacto. Una simple melodía sonando en el piso de abajo. "Pero se vuelve una melancolía... un odio profundo... ¿cómo vivir con algo así de por vida?".

¿Cómo.... cómo podrían hacerlo? Un verdad que no se les escapaba... pero eran como dos piezas de un complejo rompecabezas... no encajaban del todo, pero se parecían tanto...

"Tus labios... no... ya no son más que solo labios...".

Se sonrieron, se alejaron. Dejaron todo atrás. Cambiarían su hábito... pero muy en el fondo, ambos sabían, que volverían a ésa habitación como cada tarde a observarse con pasión, con odio, con amor, ternura y devoción... acariciarían sus corazones, llegarían a las mismas palabras, y, luego, se marcharían a sus vidas con el mismo pensamiento: "Mañana termino este nefasto hábito".

jueves, 27 de mayo de 2010

Cuando las imágenes se han convertido en una poderosa droga.

Sólo una tarde, sólo un segundo eterno, mirando, observando... todo tenía tanto detalle. El sol iluminando por sobre la cordillera nevada a lo lejos, las nubes avanzando lentamente, el cielo aclarándoce a cada momento un poco más. El frío me atravesaba como estacas de hielo en el abdomen, y mi aliento se convertía en una nube visible frente a mi rostro.
Todo era lento, hermoso... cerrar los ojos y disfrutar un momento aquella paz, tan lejana, tan deseada, y que no se aprovecha cuando se tiene... tan perfecta armonía... los colores, los olores, el frío y las luces que, quizás, darían un poco de calor a mis miembros congelados.
Entonces pensé que no se necesitaba ir a un museo para observar obras de arte, porque estaba ahí, siempre, a cada rato que pasaba, cada cosa que sucedía cada momento estancado, cada oración, cada olor, cada color, cada calor, cada frío, cada sensación cada ruido... todo se convertía en la obra más hermosa que el mundo ubiese conocido. Y siempre ha estado a nuestro alrededor.
Un solo momento, una sola mirada hacia el cielo... y se vé un árbol podado de la peor manera, un ave en su punto más alto observando no-sé-qué-cosa, y el sol bañándolos suavemente. Una fotografía no podría JAMÁS hacer vibrar mi cuerpo con aquella intesidad que ellos lo lograron.
Igual que una nota musical, en su punto máximo, recorre mis nervios, desencadenando una sensibilidad máxima. ¿Para qué drogarse? ¿Para qué alcoholizarse? Si lo tenemos todo a nuestro alcanse... Cada momento... como único en su especie.
¿Cómo poder describir tan maravillosas sensaciones? Sólo se pueden sentir

domingo, 23 de mayo de 2010

Ideas.


Postrado, cansado, agotado... sí, sólo la cabeza moviéndoce, la única energía para mover algo... los ojos vagando entre las películas de polvo bailoteando entre la luz y sus cortinas de blanco color ¿Blanco? Alguna vez habían sido así... quizás ahora ya fuesen amarillentas, cremosas... ¿es que eran o son? No lo sabe ¿o si lo sabe? Es que ya no sabe lo que lo que sabe , porque no sabe si realmente está viendo o está soñando.
O realmente está soñando, de lo contrario ¿Cómo podría estar observando algo tan maravilloso? Y si estuviese observando ¿Cómo podría hacerlo?.
Recordaba perfectamente la voz grave del doctor, los sollozos agudos de una mujer... mujer... sería la madre... ¿o era la mía? ¿Sería la nuestra? Si yo debiese haber estado al otro lado del planeta, con las calles de un inmaculado blanco, con chispas celestes, amarillas... luces brillantes... probablemente eran muy parecidas a las que él podía observar.
Cerró los ojos, pesados, rojizos, secos, no había nada más que observar, pensaba.

La tarde caía, y aún estaba atrapado entre el pensamiento, la realidad, el ensueño y la tristeza... tristeza ¿Por qué? ¿Qué había ocurrido? ¿Quién era él para mi? Porque al verme frente a un espejo olvidé mi propio reflejo, y luego lo observaba nuevamente entre sus dedos largos y delgados. Luego caí en cuenta de más detalles... mucho después.
Siempre regresaba tarde, a veces demorada hasta muy entrada la noche, cercano ya al amanecer. Traía bajo el brazo una bata blanca, siempre impecable, solo una vez lo ví con ella puesta, me recordó a un doctor, de estos de hospital, con sus rostros agotados.
Después me fijé en que solía dejar la bata blanca colgada junto a otra, pero esta era más pequeña, para una persona menuda y baja, probablemente una mujer. Olía igual que las flores, un olor completamente familiar, pero él no se daba cuenta de ello, quizás incluso lo ignoaba, o talvés lo evitaba con toda el alma... también a mí.
Pasaban las semanas, años y yo seguía vagando, desorientada, las veces que él se encontraba en el lugar, le seguía. Perdí el tiempo, las estaciones.
Prontamente él dejó de sostenerla, la fotografía donde aparecía mi reflejo. Dejó de colocar la bata blanca en su lugar.
Una noche se giró en la cama matrimonial con una mitad vacía, me observó detenidamente...


"¿Por qué no ta has marchado aún?".

domingo, 16 de mayo de 2010

22:16

Ese sentimiento... es tal cual tu mismo lo describes, ése que me haces sentir con tus palabras, con tus juegos y tus mimos... y en ése momento siento que lo siento, que es parte de ambos, que somos ambos, que es tal cual lo que yo siento. Pero cómo caer denuevo en lo mismo? Sí, soy débil, lo acepto. Quiero corromper al destino impuesto por otros, quiero correr a tus brazos y decirte "te amo".
Pero... y si luego olvidas lo que te he dicho? Si después de un tiempo se convierte en un hábito? ¿Y si pasa de ser un hábito a ser rutina? Como una rueda infinita, a la cual no le distingues el final... y te abruma, te aburre y te desgana... Entonces volveré a ser como las muñecas tiradas en un baúl. Y pensaré nuevamente "¿Qué hice mal esta vez?" y quizás fué demostrar todo lo que sentí de una sola vez.
Pero si no me arriesgo, no te tengo, no te sentiré jamás, volarás lejos... tan lejos... donde mis dedos no te puedan alcanzar... donde entregues tu amor... tus palabras... tus anhelos y tus fuerzas ... a alguien más.
¿Cómo puedes esperar a alguien así? Que con solo escucharte sonrie sin pensar, si... sin pensar...


Y quizás no pensar es lo que me falta... y si no pienso... cómo puedo evitar caer en el mismo error? Y entonces... vuelvo al mismo punto... arriesgo.

miércoles, 5 de mayo de 2010

Cuento nº1 de un pequeño arlequín.

Un silla, un vestido y una flor, nada más. Exactamente eso elementos necesitaba en un pequeño recodo de su mente divagante. Como un teatro del absurdo completamente lógico, claramente, podría desempeñar un papel protagónico (o algo por el estilo le había dicho el cirquero), ya que como arlequín ya no hay grandes negocios, y como payaso ya no habían lágrimas que soltar.

También había meditado la posibilidad de ser banquero, pero... bueno... realmente no le emocionaba del todo.

Quizo probar suerte en el mundo del espectáculo privado y, como ya adivinarán, no nos podemos acercar.

sábado, 24 de abril de 2010

"El hombre que perdió el control"

elai aCon los párpados cerrados como cerraduras que evitaban en paso de la realidad a su vista. Haciendo correr una película surrealista, completamente enloquecida, pero tranquilizadora. No soltaba sus brazos, no, no podía, no debía, no lo haría, le mantendría atrapado entre ellos, nada que separar... La película seguía pasando, oía como un pájaro cantaba a la lejanía, una pequeña melodía... un trueno quizás, sí, podía llegar a serlo, puesto que el calor del ambiente le hacía perfecta compañía... la lluvia pobrablemente ya se estaba levantando del suelo de la habitación, las paredes de verde pistacho se humedecerían aún más... y quedarían de un color marron... probablemente sería de un marrón rojizo... o de un rojo amarronado, ¿podría existir ése color?
Una fuerza superior le quería arrebatar su preciada posesión, lo único que tenía de la realidad en aquella película ennegrecida tras sus párpados clausurados. Sus brazos alzados... su calor se iba... un metal grueso le ataba las manos... y así sería, hasta que abriera nuevamente sus párpados.

Un mundo de plástico.

Cómo puede ser que lleguemos a éste punto? Un punto crítico, cualquier hombre de "bien" estaría completamente enloquecido. Niños que no pueden ser niños, mujeres que no son madres, hombres que no son padres, jóvenes que no sueñan... dónde nos dirijimos?
Una mujer no es solo madre de un bebé, de otro ser humano, no, ella es madre de sus ideas, de sus sueños, de sus creaciones, de sus música y victorias, sus derrotas también. Ya nadie hace nada.
¿Y si todos nos convertimos en marihuaneros que cantan en las plazas incluso antes de que caiga el sol? ¿Vestiremos ropas sueltas y ajadas, de colores extrabagantes y no nos bañaremos porque así es "la naturaleza"? Ellos también van bastante mal.
¿Cómo alguien de simples 17 años puede llegar a conclusiones tan... ¿feas? No se trata de ser fría, no se trata de ser depresiva... siempre hay una salida... ¿Cuándo cambiaremos? ¿Cuándo el mundo se abrirá? ¿Cuándo tendremos consciencia de las acciones? de nuestro planeta... de nuestra cultura... de nuestra mente... de las artes... de las matemáticas... de la biología... de TODO! NADA existe por sí solo.
He de considerar inteligente no aquel que saque máximo en todos los exámenes, sino a quien se esfuerce por lograr comprender todas las materias, aquel que no se tira de un 10º piso con solo haber terminado con su novio/a... aquel que no se centre en una sola vertiente de los estudios.

Hay muchas ideas mezcladas.. pero algún día estarán ordenadas ¿Para qué? Para que este mundo hecho de plástico logre comprenderlo.

martes, 13 de abril de 2010

Sueño

Despertando entre el frío punzante de la madrugada de abril y las sábanas que albergan el poco calor que emana su cuerpo. Como una espesa niebla dispersándoce lenta y pesadamente sus recuerdos difusos y lánguidos danzaban entre la realidad y el sueño.
Una situación que era real, tan real como el polvo flotante a la luz de la lámpara sobre el velador, era lo que observé con detenimiento. Una tormenta arreciaba a las afueras del lugar, un día triste y desolado, frío, arisco, con ganas de deborarse a la vida.
El deborador... quería llevarse mi luz, la única que tenía en aquel lugar sin metas ni nada a su alrededor. Algo que aún no tenía forma, no tenía movimiento, apenas si se notaba su presencia, un ser tan pequeño, algo que no llegaba siquiera a serlo verdaderamente... Trataban de arrebatármelo.

Y luego, con el corazón en un puño, nuevamente en la habitación inmersa en el frío otoñal, en la madrugada grisásea, junto a la luz artificial junto a la cama, recuerdo por fin que todo ha sido un sueño.